Datos del trasfondo

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• Veluna-Verbobonc-Hommlet.

   En la ribera sur del río Ververdyva, a varias jornadas en barco del Nyr Dyv y, por tanto, de la ciudad libre de Falcongrís, está uno de los reinos más importantes de todas las Flanaes, el Archiclerigado de Veluna. Esta teocracia está destinada al culto de Rao, y acoge en su seno a otras deidades del bien, entre la que destaca San Cuthbert.

    La fuerza milita de este reino es escasa. Sus nobles han creado una coalición con los reinos cercanos mediante una orden de caballeros destinada a defender el bien y las fronteras contra las invasiones del mal, llamada La orden del Venado. Además, en épocas de extrema necesidad, el vecino norteño que es el reino de Furyondia ha apoyado a la defensa de este lugar que representa la esperanza para todas las criaturas del bien.

   La frontera surdeste la compone el vizcondado de Verbobonc. Se trata de un semi-independiente reino en el que el culto a San Cuthbert tiene gran fuerza, importado hace una década por los defensores de Furyondia cuando se unieron los ejércitos contra las hordas del Templo del Mal Elemental.

  La parte sur del mismo coexiste con un pequeño reino gnomo. Más al sur está el reino de los elfos grises conocido como Celene (del que la figura más conocida es el guerrero mago hermano de la reina, Melf) y al suroeste un reino enano en las Montañas Lortmill que está en lucha constante con los malvados humanoides y gigantes que en él habitan. Al este se encuentra el Bosque Nudoso, atravesado por la ruta comercial hacia Dyversa, en el que las caravanas llevan escoltas poderosas para poder sobrevivir a las temibles criaturas que lo habitan.

  La capital de este reino ha conseguido mantenerse con cierta independencia, sobre todo gracias al culto de Trithereon. Su gobernante no permite la presencia de La orden del Venado, puesto que desea conservar sus fueros y es bien sabido por todos que se teme que una ocupación de esta orden se convierta en una ocupación encubierta.

Ciudad de Verbobonc

  La aldea de Hommlet, a su vez, es una aldea semiindependiente sita en plenas Colinas Kron, con un gran paso de semihumanos, especialmente gnomos. Esta villa se ha mantenido durante mucho tiempo libre de los cultos del bien centrada en La vieja Fé, una adoración del equilibrio de la madre tierra y sus criaturas. Tras la batalla en los Páramos de Emridy y la toma de La barbacana del foso, el vizconde se vio obligado a recompensar a algunos de los héroes permitiéndoles crear un castillo a unos y un templo de San Cuthbert a otros por los servicios prestados. Al final, todo no le fue tan mal a la ciudad de Verbobonc, puesto que los habitantes del castillo, que actualmente está en construcción, han jurado fidelidad al señor por encima de cualquier otra lealtad, y hasta el momento ésta ha sido probada.

Aldea de Hommlet